El Gobierno de Joe Biden en Estados Unidos descartó este jueves retirar por ahora a Cuba de la lista de países patrocinadores del terrorismo a la que fue metida por la anterior Administración del presidente Donald Trump (2017-2021).
Así lo expresó el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, al ser preguntado durante una comparecencia ante el comité de Relaciones Exteriores de la Cámara de Representantes estadounidense.
“No planeamos sacarlos de la lista”, aseveró tras los cuestionamientos de la congresista republicana por Florida María Elvira Salazar.
El líder de la diplomacia estadounidense explicó que la ley emanada del Congreso establece unos “criterios muy elevados” para que el Gobierno pueda tomar una decisión de este tipo.
“A lo que me comprometo es a que, si hubiera una revisión, se basaría en la ley y en los criterios que esta establece, que, como ya dije, tienen un listón muy alto”, sentenció Blinken.
La inclusión de Cuba en la lista en enero de 2021 fue una de las últimas decisiones que tomó el Gobierno de Trump antes de dejar el poder.
Estados Unidos justificó entonces la medida, que conlleva varias sanciones, aludiendo a la presencia en la isla de miembros de la guerrilla colombiana del ELN, que viajaron a La Habana para iniciar negociaciones de paz con el Ejecutivo de Colombia.
La isla había salido de la lista en 2015, durante la etapa de acercamiento impulsada por el entonces presidente estadounidense Barack Obama (2009-2017) y frenada por Trump, que durante su mandato redobló las sanciones sobre La Habana y frenó el “deshielo”.
La actual Administración de Biden ha hecho algunos gestos hacia la isla, como la eliminación del límite de remesas para Cuba, pero sigue lejos del acercamiento de Obama.
Exigen a la dictadura cubana la liberación de los manifestantes del 11J
El pasado 1 de marzo, diez mujeres presas en Cuba por su participación en las manifestaciones antigubernamentales del 11 de julio de 2021 (11J), exigieron este al régimen de la isla la liberación de todos los detenidos.
El pedido estuvo plasmado en un manuscrito compuesto de forma clandestina en la prisión para mujeres de Guatao, en La Habana, y le siguió a la visita a la isla de hace algunas semanas atrás del cardenal Beniamino Stella, en la que manifestó el deseo del papa Francisco de que los jóvenes que fueron privados de su libertad por expresar sus ideas sean liberados.
“Exigimos al régimen de La Habana que respete y cumpla lo dispuesto por el máximo pontífice de la Iglesia Católica, el papa Francisco, quien a través de su emisario envió su deseo y ordenanza para nuestra liberación”, comienza el escrito de las presas que fue divulgado, inicialmente, por la periodista independiente Mónica Baró, quien vive fuera de Cuba.
En la carta, las mujeres apuntan de manera directa contra el dictador Miguel Díaz-Canel, a quien instan a tomar acción inmediata, y agradecen “al representante de la Iglesia en el mundo” por preocuparse por la situación de los presos cubanos.
“La sangre simboliza nuestro sacrificio y entrega a la causa cubana y la firmeza de nuestros ideales. ¡Libertad para los presos políticos!”, cierra el documento que está firmado con sangre por Mariuska Díaz, Angélica Garrido Rodríguez, María Cristina Garrido Rodríguez, Gloria López, Mailene Noguera, Lizandra Góngora, Yessica Coimbra y Odett Hernández, entre otras.
El pasado 8 de febrero, el cardenal Stella llegó a Cuba en una misión en nombre del papa Francisco, en la cual pidió poner fin a la represión y la censura en la isla. “Es importante que los jóvenes que en un momento manifestaron su pensamiento de la forma que conocemos puedan volver a sus casas”, comentó entonces y agregó que “el Papa desea mucho que haya una respuesta positiva” por parte del régimen de Díaz-Canel.