El régimen de Irán ha cerrado 150 establecimientos comerciales en todo el país por permitir la entrada de mujeres sin velo, según informó la agencia de noticias Mehr.
La medida se produce después de que la policía religiosa del país llevara a cabo una campaña de vigilancia para hacer cumplir la obligatoriedad del uso del hiyab o velo en público para las mujeres. El hiyab es una prenda de vestir tradicional que cubre la cabeza y el cuerpo de las mujeres en el Islam.
Desde la Revolución Islámica de 1979, el uso del hiyab ha sido obligatorio en público para todas las mujeres en Irán. A pesar de esto, muchas mujeres iraníes han estado desafiando esta norma en los últimos años, quitándose el velo en público como un acto de desobediencia civil.
El régimen ha respondido a estas protestas con medidas represivas cada vez más duras. En los últimos meses, se han intensificado los esfuerzos para hacer cumplir la obligatoriedad del uso del hiyab en público, incluyendo la detención de mujeres que se niegan a usarlo.
La clausura de los comercios que aceptaron mujeres sin velo es una muestra más de la determinación del régimen iraní para hacer cumplir sus normas religiosas y sociales. Aunque la medida ha sido criticada por grupos de derechos humanos y activistas, el régimen ha afirmado que se trata de una medida necesaria para preservar la moralidad y la decencia en la sociedad.
La situación de los derechos humanos en Irán ha sido objeto de preocupación para la comunidad internacional durante muchos años. Las restricciones a la libertad de expresión, la represión de la disidencia política y las violaciones de los derechos de las mujeres y las minorías religiosas son algunos de los principales problemas que enfrenta el país.
La clausura de los comercios que permitieron la entrada de mujeres sin velo es un recordatorio de que la lucha por los derechos humanos en Irán sigue siendo un desafío importante. Es necesario que la comunidad internacional siga presionando al régimen iraní para que respete los derechos de todos los ciudadanos del país, independientemente de su género, religión u orientación política.